DÚO DE GUITARRASBOCACCIO-GALLINO
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Su forma de tocar es de una seguridad convincente y una riqueza sutil que va más allá de lo que nos tienen acostumbrados los dúos de guitarra. Además, tocaron con tal sentido del ritmo que lograron imprimir a la música Argentina, tan sincopada y de carácter rítmico complejo, el exacto tratamiento que ella exige. El diálogo musical entre Bocaccio & Gallino alcanzó matices y una sensibilidad sonora que yo quisiera titular a su concierto de la siguiente manera: "Maestros del Sonido" El público retribuyó con una ovación la espléndida actuación de Bocaccio-Gallino. Erik Mollerstrom. Gitarr och Luta |
Un dúo que juega con las fronteras Cristian Vitale. Página 12 |
Con la prolijidad propia del estudio a conciencia, el disco transita las distintas composiciones bajo un mismo patrón: ninguna nota se ejecuta al azar. Puede que eso le quite algo de frescura a la primera oída, pero, lejos de ser un defecto, resulta una virtud: el talento, cuando se educa, sabe mejor. Revista VEINTITRES |
En el resto del programa hay algunas otras piezas deliciosas, que no solamente muestran la musicalidad de este dúo a pleno, sino que también ilustran que riqueza de melodías llegan desde esa parte del mundo. Un disco que se disfruta desde el principio hasta el fin STEVE MARSH. Classical Guitar Magazine |
Aunque el programa se abre con un Estudio en si menor compuesto para dos guitarras por el músico paraguayo Agustín Barrios (en el que Enrique Alberto Bocaccio y Juan Leonardo Gallino exponen la precisión de su toque y la fluidez de su diálogo), es la cultura popular de América latina la que proporciona al dúo el material para este nuevo álbum. Fernando López. Diario LA NACIÓN |
L'encouragement de Sor fue un verdadero deleite, cada uno de los movimientos fue transmitido en forma homogénea, fluida y cálida, unidos a una musicalidad y fraseo ejemplares. EL COMERCIO, LIMA |
Hay en las piezas elegidas no sólo variedad de ritmos sino también multiplicidad de problemas que los intérpretes sortean con apreciable desenvoltura. LA NACIÓN, BUENOS AIRES |